La Vida no se mide anotando puntos, como en un juego. La
vida no se mide por el número de amigos que tienes, ni por cómo te aceptan los
otros.
No se mide según los planes que tienes para el fin de semana o por si te
quedas en casa sólo. No se mide según con quién sales, con quién solías salir,
ni por el número de personas con quienes has salido, ni por si no has salido
nunca con nadie.
No se mide por las personas que has besado. No se mide por
la fama de tu familia, por el dinero que tienes, por la marca de coche que
manejas, ni por el lugar donde estudias o trabajas.
No se mide ni por lo guapo ni por lo feo que eres, por la
marca de ropa que llevas, ni por los zapatos, ni por el tipo que música que te
gusta.
La vida, simplemente, no es nada de eso…
La vida: Se mide según a quién amas y según a quién dañas.
Se mide según la felicidad o la tristeza que proporcionas a otros. Se mide por
los compromisos que cumples y las confianzas que traicionas.
Se trata de la amistad, la cual puede usarse como algo
sagrado o como un arma.
Se trata de lo que se dice y lo que se hace y lo que se quiere decir o hacer, sea dañino o benéfico.
Se trata de los juicios que formulas, por qué los formulas y a quién o contra quién los comentas.
Se trata de a quién no le haces caso o ignoras intencionalmente.
Se trata de los celos, del miedo, de la ignorancia y de la venganza.
Se trata del amor, el respeto o el odio que llevas dentro de tí, de cómo lo cultivas y de cómo lo riegas.
Se trata de lo que se dice y lo que se hace y lo que se quiere decir o hacer, sea dañino o benéfico.
Se trata de los juicios que formulas, por qué los formulas y a quién o contra quién los comentas.
Se trata de a quién no le haces caso o ignoras intencionalmente.
Se trata de los celos, del miedo, de la ignorancia y de la venganza.
Se trata del amor, el respeto o el odio que llevas dentro de tí, de cómo lo cultivas y de cómo lo riegas.
Pero por la mayor parte, se trata de sí usas la vida para
alimentar el corazón de otros.
Tú y solo tú escoges la manera en que vas a afectar a otros y esas decisiones son de lo que se trata la vida.
Hacer un amigo es una gracia. Tener un amigo es un don. Conservar un amigo es una virtud. Ser un amigo es un honor y un privilegio .
Una vez más,una bella reflexión sobre la vida y la amistad, llena de verdades, espero que la hayas disfrutado, y deje algo en tu vida, como lo ha hecho en la mía
R.C. de Interés
La amistad sólo podía tener lugar a través del desarrollo del respeto mutuo y dentro de un espíritu de sinceridad.
ResponderEliminarDalai Lama
Mucha gente entra en y sale de su vida a lo largo de los años. Pero solo los verdaderos amigos dejan huellas en su corazón.
ResponderEliminarla vida va poniendo a tu paso en cada etapa a las personas que necesitamos. Saber verlas y apreciarlas es nuestra tarea.
ResponderEliminarMe gustan estas reflexiones, escasas hoy día, en esta red tan tecnológica y noticiera.