"El discípulo dijo Maestro: -He pasado gran parte de mi vida viendo cosas que no debía ver, deseando cosas que no debía desear, haciendo planes que no debía hacer.
El maestro invitó al discípulo a dar un paseo. Por el camino señaló una planta y preguntó al discípulo si sabia lo que era.
-Belladona, dijo el alumno.
-Pues bien, ella puede matar a quien coma sus hojas, pero no puede matar a quien se limite a contemplarla. De la misma manera los deseos negativos no pueden causar ningún mal, si tú no te dejas seducir por ello"
Autor Desconocido
Que gran moraleja tiene esta fábula, amiga, hay que aprender la difícil tarea de alejarse de los problemas para poder analizarlos fríamente.
ResponderEliminarBesos
Supongo que tampoco es fácil saber que la Belladona es Belladona, ni que la bella Dona es, como símbolo de tentación, nos lleva a la muerte. ¿A dónde irán los inocentes y los que no tienen maestros?
ResponderEliminarEs muy dificil mirar objetivamente el problema estando dentro de el.
ResponderEliminarLa distancia cambia la optica del problema.
Un beso
Sabias palabras, que tal concentración de pensamiento en tan cortas líneas. Es verdad que el mundo se ve desde nuestra perspectiva. Aceptarlo como un lugar hermoso aunque inevitablemente caótico y complejo se me presenta al leer el escrito. Un abrazo.
ResponderEliminarMario.
Canoso, cuando analizas friamente los problemas, podemos encontrar mejores soluciones, un fuerte abrazo mi lindo amigo
ResponderEliminarFlenning, esn este caso es la hermosa planta Belladona, es mortal, cuantas cosas hay en la vida que pasamos desapercibidas y nos pueden causar daño? Un fuerte abrazo mi amigo
ResponderEliminarTR, a la distancia, como dices tienes una mejor perspectiva, y nos permite proyectar las cosas de otra manera. Un fuerte abrazo mi querido amigo
ResponderEliminarMario, pueden ser mucho los peligros, pero podemos ver la belleza en ellos, como en esta fabula, debemos tratar de ver lo extraordinario, y alejarnos del peligro. Un fuerte abrazo amigo mio
ResponderEliminarSomos humanos y no tener deseos negativos resulta casi imposible.Lo realmente importante es saber no sucumbir a ellos.
ResponderEliminarUn besote.
Sagitare, los peligros como dices siempre estaran, la diferencia es si noes dejamos seducir por ellos, ellos como tales no te pueden causar mal. Un fuerte abrazo querido amigo
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