El rencor es un profundo resentimiento que se incuba como una enfermedad. El rencoroso se aferra a ese sentimiento de manera obstinada y obsesiva lo cual le provoca debilidad en su salud mental.
La persona que siente rencor suele "rumiar" sus rencores, aumentándolos generalmente con fantasías creadas por sus pensamientos que nada tienen que ver con la realidad.
Toda emoción negativa no sólo es perjudicial desde el punto de vista emocional, también repercute en nuestro organismo, en nuestra salud física. Cuando las personas tienen rencor o piensan en situaciones de venganza, tanto la presión arterial como el ritmo cardíaco se disparan al doble su actividad normal.
Lo que está claro es que quien alberga estos sentimientos con frecuencia, experimentando estos estados insanos, con el tiempo, no sólo sufrirá estrés sino que también podrá desembocar en algún daño cardiovascular.
La persona que siente rencor suele "rumiar" sus rencores, aumentándolos generalmente con fantasías creadas por sus pensamientos que nada tienen que ver con la realidad.
Toda emoción negativa no sólo es perjudicial desde el punto de vista emocional, también repercute en nuestro organismo, en nuestra salud física. Cuando las personas tienen rencor o piensan en situaciones de venganza, tanto la presión arterial como el ritmo cardíaco se disparan al doble su actividad normal.
Lo que está claro es que quien alberga estos sentimientos con frecuencia, experimentando estos estados insanos, con el tiempo, no sólo sufrirá estrés sino que también podrá desembocar en algún daño cardiovascular.
Consejos:
- Provocar en uno mismo las emociones opuestas, posibilita que se revierta ese malestar en el organismo. Si se piensa y se imagina que se perdona, los ritmos vuelven a normalizarse.
- El rencor debe superarse necesariamente. Su superación permite que aflore la creatividad y la capacidad de hacer cosas.
Hay varias formas:
Lo primero es darse cuenta de que existe y que lo que sentimos es rencor.
Luego la principal y natural manera de superarlo es expresar el enojo a la persona que lo generó.
Otra forma es aprender a perdonar.
Muchas otras veces la única opción que nos queda es aceptar el daño.
Está claro que todos alguna vez hemos sido dañados, pero no podemos odiar para siempre, no hay mal que cien años dure y cuerpo que lo resista.
- Provocar en uno mismo las emociones opuestas, posibilita que se revierta ese malestar en el organismo. Si se piensa y se imagina que se perdona, los ritmos vuelven a normalizarse.
- El rencor debe superarse necesariamente. Su superación permite que aflore la creatividad y la capacidad de hacer cosas.
Hay varias formas:
Lo primero es darse cuenta de que existe y que lo que sentimos es rencor.
Luego la principal y natural manera de superarlo es expresar el enojo a la persona que lo generó.
Otra forma es aprender a perdonar.
Muchas otras veces la única opción que nos queda es aceptar el daño.
Está claro que todos alguna vez hemos sido dañados, pero no podemos odiar para siempre, no hay mal que cien años dure y cuerpo que lo resista.
..."Vengándose, uno se iguala a su enemigo; perdonándolo, se muestra superior a él."Francis Bacon
..."Perdonar es el valor de los valientes. Solamente aquel que es bastante fuerte para perdonar una ofensa, sabe amar."Mahatma Gandhi
Fuente: PARA SABER.SALUD
Como citan las frases, es mucho más fuerte el que perdona, y mucho mejor es amar. Nos trae por más beneficios para nuestra salud y bienestar emocional.
Pienso que ganamos mucho más perdonando, limpiando nuestra alma y corazón, que atrapando nuestros sentimientos en rencores innecesarios.
Suelo decir a mis hijos desde pequeños, si no da positivo, que cuando menos, se quede en cero, no dejes que se vaya en negativo, que solo daña tu corazón.
R.C. de Interés
Como citan las frases, es mucho más fuerte el que perdona, y mucho mejor es amar. Nos trae por más beneficios para nuestra salud y bienestar emocional.
Pienso que ganamos mucho más perdonando, limpiando nuestra alma y corazón, que atrapando nuestros sentimientos en rencores innecesarios.
Suelo decir a mis hijos desde pequeños, si no da positivo, que cuando menos, se quede en cero, no dejes que se vaya en negativo, que solo daña tu corazón.
R.C. de Interés
Con frecuencia pensamos que el perdón es un regalo para el otro sin darnos cuenta que los únicos beneficiados somos nosotros mismos, ya que es nosotros a los dara paz. Buen tema!
ResponderEliminarEl saber perdonar hace nuestra carga más ligera, pero en muchas ocaciones la soberbia, nos impide actuar.
ResponderEliminarHola
ResponderEliminarme gusta tú enfoque de transmutar odio por amor
y lo has rematado con certeras citas
malo es ser cobarde para pedir perdón, pero muchas veces es confundido
un abrazo fuerte que deja sin respiración para ti amiga R.C.
Por mas que uno termine perdonasndo, el perdon no consigue limpiar todas las migas de rencor, que tenemos.
ResponderEliminarsaludos
Sabes, R.C., éste es un tema que he desarrollado de manera muy escueta en uno de mis libros. Enhorabuena por el desarrollo y los diferentes matices con los que lo involucras, incluyendo los sanos consejos con los que enriqueces tu texto.
ResponderEliminarUna muy interesante reflexión la que nos traes hoy, personalmente creo que no soy una persona rencorosa, el mantener rencor hacia una persona que te ha echo daño es un trabajo que no te lleva a ninguna parte y un esfuerzo que intento dedicar a otras cosas aunque reconozco que al principio cuando el daño es reciente lo que he escrito es difícil de llevar a cabo.
ResponderEliminarUn saludo.
http://solorencor.blogspot.com.es/2010/12/por-que-rencor.html
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