En realidad la pintura la tenía Vincenzo Perugia, un ex-empleado del museo que había aprovechado el turno de noche para llevarse la pintura bajo el brazo. La policía registró el museo de arriba abajo y las pesquisas llegaron hasta Apollinaire y de él a Pablo Picasso, ya que había adquirido dos esculturas robadas del Louvre a un tal Pieret. Picasso devolvió las esculturas y negó cualquier relación con el robo mientras Apollinaire fue absuelto. Mientras tanto, Vincenzo Perugia trato durante más de dos años vender la Gioconda a diversos museos, pero siempre recibía la misma respuesta de sus directores: tenía que tratarse de una falsificación. Al fin encontró un comprador: la galería Uffizi de Florencia, en Italia. Pero días más tarde, el dueño de la galería aviso a la policía francesa y Vincenzo Perugia fue detenido.
Fuente: ERRORES HISTORICOS
Curiosa esta historia, y mientras la leo y re-leo, pienso en los dos años que intento vender, una pintura tan famosa y valiosa, y claro nadie, pensaría que era "original"
R.C. de Interés
Curiosa esta historia, y mientras la leo y re-leo, pienso en los dos años que intento vender, una pintura tan famosa y valiosa, y claro nadie, pensaría que era "original"
R.C. de Interés
no sabia que Picasso intervino en un robo
ResponderEliminarmuy interesante
un abrazo