Doña Primavera
viste que es primor,
viste en limonero
y en naranjo en flor.
Lleva por sandalias
unas anchas hojas,
y por caravanas
unas fucsias rojas.
Salid a encontrarla
por esos caminos.
¡Va loca de soles
y loca de trinos!
Doña Primavera
de aliento fecundo,
se ríe de todas
las penas del mundo...
No cree al que le hable
de las vidas ruines.
¿Cómo va a toparlas
entre los jazmines?
¿Cómo va a encontralas
junto de las fuentes
de espejos dorados
y cantos ardientes?
De la tierra enferma
en las pardas grietas,
enciende rosales
de rojas piruetas.
Pone sus encajes,
prende sus verduras,
en la piedra triste
de las sepulturas...
Doña Primavera
de manos gloriosas,
haz que por la vida
derramemos rosas:
Rosas de alegría,
rosas de perdón,
rosas de cariño,
y de exultación.
Gabriela Mistral
La primera y única mujer latinoamericana premiada con el Premio Nobel de Literatura, su verdadero nombre Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga
R.C. de Interés
Olores nuevos, colores vivos, brotes que se abren y son hermosas flores .... Una vida nueva ;)
ResponderEliminarBesos enormes
Olor a frescura, animos que se se abren en cada petalo, ilusiones que suregen, Gracias mi querida LaMar
ResponderEliminarGracias querida amiga por tan bello poema.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Gracias a tí Eric, por estar siemprepor casa, la verdad es que es del patrimonio que nos dejo Gabriela Mistral, y en esta época queda bien. Un gran abrazo
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