“Muchas cosas se reputan imposibles antes de haberse realizado."
Plinio el Viejo
BIOGRAFÍA:
Gayo Plinio Cecilio Segundo, conocido como Plinio el Viejo, fue un romano. Nació en Comum (la actual Como, en Italia) en el año 23 y murió en Estabia (hoy Castellammare di Stabia) el 25 de agosto del año 79.
Tras estudiar en Roma, a los veintitrés años inició su carrera militar en Germania, con una duración de doce años. Llegó a ser comandante de caballería antes de regresar a Roma, en el año 57, donde se dedicó al estudio y cultivo de las letras. A partir del año 69 desempeñó varios cargos oficiales al servicio del emperador Vespasiano. Agudo observador, fue autor de algunos tratados de caballería, una historia de Roma y varias crónicas históricas, hoy perdidas. Perteneció al orden ecuestre. Desarrolló su carrera durante el mandato de Nerón vivió principalmente en Roma, donde asistió a la construcción de la Domus Aurea de Néron después del gran incendio del año 64 (XXXVI. 111).Entre tanto, completa los veinte libros de su Historia de las guerras germánicas. Bajo la influencia de Séneca, llegó a ser un estudiante apasionado de la filosofía y la retórica y comenzó a ejercer la profesión de abogado. A su regreso a Italia, aceptó un cargo de Vespasiano, quien le consultaba antes de dedicarse a sus ocupaciones oficiales. Al final de su mandato, se consagró esencialmente a sus estudios (Pun. Epp. III. 5, 9).Completó una Historia de su tiempo en 31 libros, que tratando desde el reinado de Nerón hasta el de Vespasiano, no quiso que se publicara hasta después de su muerte (N. H., Praef. 20). Esta obra es citada por Tácito (Ann. XIII. 20, XV. 53; Hist. III. 29) y tuvo influencia sobre Suetonio y Plutarco.
Casi llegó a terminar su gran obra Naturalis Historia, una enciclopedia en la que Plinio reúne una gran parte del saber de su época. Este trabajo había sido planificado bajo la dirección de Nerón. Las informaciones que recoge llegan a ocupar no menos de 160 volúmenes, cuando Larcio Licino, el legado pretor de la Hispania Tarraconense, intenta en vano comprarlos por el equivalente a más de 200 000 £ (valor estimado en 2002). Dedicó esta obra a Tito Flavio Vespasiano en el año 77.
Poco después es nombrado por Vespasiano prefecto de la flota romana en Misenum (Miseno).
El 24 de agosto de 79, cuando se produce la erupción del Vesubio que sepultó a Pompeya y Herculano, se encontraba en Miseno. Queriendo observar el fenómeno más de cerca y deseando socorrer a algunos de sus amigos que se encontraban en dificultades sobre las playas de la bahía de Nápoles, atravesó con sus galeras la bahía llegando hasta Stabies (hoy Castellamare di Stabia), donde murió, posiblemente asfixiado, a la edad de 56 años.
La erupción fue descrita por su sobrino Plinio el Joven, de ahí que en la vulcanología antigua se haya denominado «erupción plínica» a la erupción violenta de un volcán con proyección en altura de materiales pulverizados formando un penacho con figura de sombrilla.
El relato de sus últimas horas es contado en una interesante carta que su sobrino y heredero, Plinio el Joven, dirige, 27 años después de los hechos, a Tácito (Epp. VI. 16). También envió, a otro corresponsal, un informe sobre los escritos y el modo de vida de su tío (III. 5):
Comenzaba a trabajar al salir el día.... No leía nada sin hacer un resumen porque decía que no había libro, por malo que fuese, que no contuviera algún valor. Estando en casa, sólo excluía la hora del baño para estudiar. Cuando viajaba, y había sido descargado de otras obligaciones, se consagraba únicamente al estudio. En una palabra, consideraba como perdido el tiempo que no podía dedicar al estudio.
Plinio el Joven
El único fruto de su incansable labor que ha llegado a nuestros días es su Naturalis Historia, que fue utilizada como referente durante varios siglos por innumerables alumnos.
Plinio el Viejo
BIOGRAFÍA:
Gayo Plinio Cecilio Segundo, conocido como Plinio el Viejo, fue un romano. Nació en Comum (la actual Como, en Italia) en el año 23 y murió en Estabia (hoy Castellammare di Stabia) el 25 de agosto del año 79.
Tras estudiar en Roma, a los veintitrés años inició su carrera militar en Germania, con una duración de doce años. Llegó a ser comandante de caballería antes de regresar a Roma, en el año 57, donde se dedicó al estudio y cultivo de las letras. A partir del año 69 desempeñó varios cargos oficiales al servicio del emperador Vespasiano. Agudo observador, fue autor de algunos tratados de caballería, una historia de Roma y varias crónicas históricas, hoy perdidas. Perteneció al orden ecuestre. Desarrolló su carrera durante el mandato de Nerón vivió principalmente en Roma, donde asistió a la construcción de la Domus Aurea de Néron después del gran incendio del año 64 (XXXVI. 111).Entre tanto, completa los veinte libros de su Historia de las guerras germánicas. Bajo la influencia de Séneca, llegó a ser un estudiante apasionado de la filosofía y la retórica y comenzó a ejercer la profesión de abogado. A su regreso a Italia, aceptó un cargo de Vespasiano, quien le consultaba antes de dedicarse a sus ocupaciones oficiales. Al final de su mandato, se consagró esencialmente a sus estudios (Pun. Epp. III. 5, 9).Completó una Historia de su tiempo en 31 libros, que tratando desde el reinado de Nerón hasta el de Vespasiano, no quiso que se publicara hasta después de su muerte (N. H., Praef. 20). Esta obra es citada por Tácito (Ann. XIII. 20, XV. 53; Hist. III. 29) y tuvo influencia sobre Suetonio y Plutarco.
Casi llegó a terminar su gran obra Naturalis Historia, una enciclopedia en la que Plinio reúne una gran parte del saber de su época. Este trabajo había sido planificado bajo la dirección de Nerón. Las informaciones que recoge llegan a ocupar no menos de 160 volúmenes, cuando Larcio Licino, el legado pretor de la Hispania Tarraconense, intenta en vano comprarlos por el equivalente a más de 200 000 £ (valor estimado en 2002). Dedicó esta obra a Tito Flavio Vespasiano en el año 77.
Poco después es nombrado por Vespasiano prefecto de la flota romana en Misenum (Miseno).
El 24 de agosto de 79, cuando se produce la erupción del Vesubio que sepultó a Pompeya y Herculano, se encontraba en Miseno. Queriendo observar el fenómeno más de cerca y deseando socorrer a algunos de sus amigos que se encontraban en dificultades sobre las playas de la bahía de Nápoles, atravesó con sus galeras la bahía llegando hasta Stabies (hoy Castellamare di Stabia), donde murió, posiblemente asfixiado, a la edad de 56 años.
La erupción fue descrita por su sobrino Plinio el Joven, de ahí que en la vulcanología antigua se haya denominado «erupción plínica» a la erupción violenta de un volcán con proyección en altura de materiales pulverizados formando un penacho con figura de sombrilla.
El relato de sus últimas horas es contado en una interesante carta que su sobrino y heredero, Plinio el Joven, dirige, 27 años después de los hechos, a Tácito (Epp. VI. 16). También envió, a otro corresponsal, un informe sobre los escritos y el modo de vida de su tío (III. 5):
Comenzaba a trabajar al salir el día.... No leía nada sin hacer un resumen porque decía que no había libro, por malo que fuese, que no contuviera algún valor. Estando en casa, sólo excluía la hora del baño para estudiar. Cuando viajaba, y había sido descargado de otras obligaciones, se consagraba únicamente al estudio. En una palabra, consideraba como perdido el tiempo que no podía dedicar al estudio.
Plinio el Joven
El único fruto de su incansable labor que ha llegado a nuestros días es su Naturalis Historia, que fue utilizada como referente durante varios siglos por innumerables alumnos.
”Lo mejor que la naturaleza ha dado al hombre es la brevedad de su vida.”
Plinio el Viejo
De ahí que, cuando estalló la erupción del Vesubio, que sepultó a Pompeya y Herculano bajo toneladas de lava, en el año 79 d.C., fuera Plinio el Viejo quien estuviera encargado de las labores de rescate de los pobladores de las zonas afectadas. Debe decirse que esta misión la cumplió con enorme celeridad, evacuando por mar a la gente perseguida por la lava, pero entonces, el científico se impuso al oficial, y decidió aventurarse hacia la erupción, dispuesto a echar una miradita que pudiera enseñarle un poco más sobre aquel fenómeno natural, que quizás no tuviera una nueva oportunidad de estudiar. Nunca más regresó.
--- Dicen que era tanta su curiosidad que fue acercado se y, de miradita en miradita, para ver y ver, hasta que los gases tóxicos, le asfixiaron, la miradita le costo la vida.
Fuente Consultada:
http://es.wikipedia.org/wiki/Plinio_el_Viejohttp://sigloscuriosos.blogspot.com/2008/01/la-muerte-de-plinio-el-viejo.html
“El primer favor denegado anula todos los anteriores.”
Plinio el Viejo
¡Muy bien mi querida R.C.! Te "aplicaste" en la Historia ¿verdad que es interesante? Y me gustó el que introdujeras citas del gran "Don" Plinio el Viejo, a quien dedicaste esta anotación, como: "Muchas cosas se refutan imposibles antes de realizarlas". También me gustaron las anécdotas de su vida...la más sorprendente la de su muerte: mira que morir por querer saber más sobre el fenómeno natural de la explosión del volcán Vesubio...¡A lo que lo llevo su interés por el conocimiento!
ResponderEliminarUn abrazo Amiga
Laura Marco(MissComentarios)
Lindo paseo por la historia, pocas personas ví que recordaran a Plinio El Viejo, me encantó el post, puesto que me gustan sus pensamientos. Un fuerte abrazo mi niña.
ResponderEliminarUn sabio, no hay duda. Y las frases son de esas que no hay que olvidar ;)
ResponderEliminarBesos enormes
Un buen repaso de historia, la frase final está muy bien.
ResponderEliminarAbrazo
Te pasaste Regina!!!!!!!!!me encantó!!!!
ResponderEliminarAbrazos bien apretaditos.
Ambar...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMis Comentarios, tenias razón, la historia puede ser apasionante, Je,je, así fué, me aplique, más que en el colegio, tome notas, y tome información de aqui y alla, y asi empece porque me llamo la atención su muerte, estaba leyendo formas de morir tontas, y me apareció, Plinio el viejo, por acercarse a la erupcion al Vesubio, una cosa llevo a la otra, busque si era verdad, busque su vida, vi su pasión las ciencias naturales.... pero niña eso debe haber sido un azador! y fui armando su historia, escribirla fué apasionante, y tomando vida se aprende más que en el colegio, y se disfruta, ahora entiendo y doy la razón a lo que decias el otro día. Un fuerte abrazo mi amiga!
ResponderEliminarGracias, Mis Letras, en ocaciones las historia tienen sus anectodas interesantes y las tres frases de Plinio El Viejo, que estan el relato, me han parecido muy acertadas para compartilas un fuerte abrazo mi amiga
ResponderEliminarLas frases si de apuntarselas mi querida niña, lo de sabio, me queda la duda, al rostizarse, mi querida LaMar, pero bueno de cierta forma fue en busca del conocimiento. Un fuerte abrazo mi niña
ResponderEliminarGracis mi querido José Jaime, vaya que sólo tenemos valles y montañas, no hay volcanes que nos rosticen, jeje... la frase: “El primer favor denegado anula todos los anteriores.” es como si borrara todo lo que ocurrrido antes. Un fuerte abrazo de Montaña Tita
ResponderEliminarVez! Ambar es que ando de aplicadita, lo bueno es que era a libro a bierto sino me quedo desde el nombre. Me fascina que te encate. Abrazos más apretaditos, mi querda amiga
ResponderEliminarPlinio el Viejo, la mayor autoridad científica del imperio, demostró que la mujer menstruada agriaba el vino nuevo, esterilizaba las cosechas, secaba las semillas y las frutas, mataba los injertos de plantas y los enjambres de abejas, herrumbraba el bronce y volvía locos a los perros.
ResponderEliminarhttp://joseluisregojo.blogspot.com/2012/03/romanas-griegas-regalo-especial.html