
Serán quizás
como los colores, unos nos dan paz, otros son intensos, los abra opacos,
brillantes y a lo mejor como el aire, o el agua, incoloros.
No es que
sean buenos o malos, simplemente son.
Aunque no
puedo negar, que ha habido momentos en mi vida, como los sabores, amargos,
insípidos (algunos), también reconozco que los hay muy dulces.
Algunos
huelen como la Navidad; o el perfume del bebé, en tus manos, cuando tienes un hijo y lo
abrazas; el olor de las primeras rosas que llegan a tu vida, son especiales.
Hay algunos
que dejan huella en nuestras vidas, y se convierten en nuestras experiencias,
que con el tiempo van forjando nuestra forma de ser.
Sentir es
estar vivo… Cada momento es un regalo del que podemos aprender.
La vida me
ha llevado por diferentes caminos, unos empinados, otros en bajada y los hay con mil vueltas; pero cada
uno ha traído sentimientos y experiencias en mi vida.
Gracias a
la vida, y a todo@s los que me acompañan en ella, especialmente a mis hijos.
Autor:
Regina Castejón
Imagen:
Regina Castejón
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Gracias tú opinión, es muy valiosa para mí y me agrada conocerla.