El Taj-Mahal, la maravilla arquitectónica más famosa de la India, se sitúa en Agra. Fue mandado construir en 1631 por el emperador Shah Jahan en memoria de su esposa Mumtaz Mahal, "elegida de palacio", de la que estaba profundamente enamorado. Fruto del amor, el edificio es llamado por los indios "Poema de amor en piedra”
La tumba está junto al río Yamuna, en el extremo de un jardín cuádruple o charbagh, sobre una plataforma que comparte con cuatro minaretes y dos edificios gemelos laterales: una mezquita y una hospedería real. El mausoleo sorprende por la pureza de sus proporciones, pues la altura del edificio sin el remate es igual a la longitud de cada uno de los lados. Situado sobre una terraza de mármol blanco, la construcción de tan magnífico edificio duró unos veinte años, y en ella trabajaron 20.000 obreros en turnos de día y de noche. Todo lujo fue poco. 1.000 elefantes llevaron en sus lomos jade de China, calcedonia de Egipto y perlas de Damasco. En el mármol del zócalo del edificio, se labraron plantas y flores que aluden al paraíso, con incrustaciones de piedras preciosas. Tan exquisito es el trabajo que del Taj-Mahal se ha dicho que fue "diseñado por gigantes y terminado por joyeros". Dentro del mausoleo reposa el cenotafio de la amada reina, con joyas incrustadas. Magníficamente labrado, el único objeto asimétrico en el edificio es el féretro del emperador, vecino al de la reina, que fue construido posteriormente. Para su desgracia, el emperador había sido depuesto por su hijo y duró ocho años en prisión, desde donde podía amargamente ver su gran obra, el Taj. Pero lo más sorprendente de este monumento es su luz. Los cambios de la luz del día y las estaciones inciden de una manera prodigiosa en el mármol blanco veteado y translúcido, ofreciendo un abanico de maravillosas tonalidades siempre diferentes, casi como si fuera un milagro.
La tumba está junto al río Yamuna, en el extremo de un jardín cuádruple o charbagh, sobre una plataforma que comparte con cuatro minaretes y dos edificios gemelos laterales: una mezquita y una hospedería real. El mausoleo sorprende por la pureza de sus proporciones, pues la altura del edificio sin el remate es igual a la longitud de cada uno de los lados. Situado sobre una terraza de mármol blanco, la construcción de tan magnífico edificio duró unos veinte años, y en ella trabajaron 20.000 obreros en turnos de día y de noche. Todo lujo fue poco. 1.000 elefantes llevaron en sus lomos jade de China, calcedonia de Egipto y perlas de Damasco. En el mármol del zócalo del edificio, se labraron plantas y flores que aluden al paraíso, con incrustaciones de piedras preciosas. Tan exquisito es el trabajo que del Taj-Mahal se ha dicho que fue "diseñado por gigantes y terminado por joyeros". Dentro del mausoleo reposa el cenotafio de la amada reina, con joyas incrustadas. Magníficamente labrado, el único objeto asimétrico en el edificio es el féretro del emperador, vecino al de la reina, que fue construido posteriormente. Para su desgracia, el emperador había sido depuesto por su hijo y duró ocho años en prisión, desde donde podía amargamente ver su gran obra, el Taj. Pero lo más sorprendente de este monumento es su luz. Los cambios de la luz del día y las estaciones inciden de una manera prodigiosa en el mármol blanco veteado y translúcido, ofreciendo un abanico de maravillosas tonalidades siempre diferentes, casi como si fuera un milagro.
Precioso lugar.
ResponderEliminarCómo estás tú? Te echamos de menos.
Besos.
Es bellísimo, Juanjo, y la histaria detrás de él remarca, este sería uno de los lugares que me gustaria conocer. Estoy bien gracias, por preguntar, de hecho con mucho trabajo, pero alli voy. Un fuerte abrazo a los 3
ResponderEliminarHola,
ResponderEliminarTiene que ser increible poder verlo en vivo y en directo. : )
Abrazos
Por algo esta incluido dentro de las siete maravillas del mundo.Habra que hacer algun hueco en la agenda para ir a visitarlo.
ResponderEliminarTremenda demostracion de amor.Un saludo
Debe ser de primera, estar parado frente a él Chema, aunque gracias a la tecnologia, le podemos ver de reojo, cosa que no hubiera sido posible hace un siglo, insisto que debe ser impresionante. Un fuerte abrazo, gran amigo
ResponderEliminarMarian, comparto es bellísima demostración de amor. Mi agenda esta disponible, el problema es la cartera, pero que bueno que podamos admirar virtualmente, cuando vayas no dejes de enviarme fotografias. Un fuerte abrazo, mi niña
ResponderEliminarUn lugar hermoso, lastima que fuera a costa de mano de obra barata
ResponderEliminary con un nivel de pobreza a su alrededor enorme
Abrazo
Así es Jose,la contruccion del edificio duró veinte años, y en ella trabajaron 20.000 obreros. Todo lujo fue poco. 1.000 elefantes llevaron en sus lomos jade de China, calcedonia de Egipto y perlas de Damasco.Imagino que debe haber sido una contrucción impresionante, con sólo ver pasar a los elefantes.Un fuerte abrazo de Montaña
ResponderEliminarPrecioso lugar y preciosa historia que siempre me ha encantado, la de su construcción.
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